Teófilo Gutiérrez prendió la fiesta en la despedida de la Selección Olímpica
El barranquillero fue la figura del triunfo 2-0 ante Honduras.
La Selección Colombiana de fútbol venció este domingo por 2-0 a su similar de Honduras en el último juego preparatorio de cara a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, donde la gran figura fue el delantero barranquillero Teófilo Gutiérrez quien marcó gol y encendió las emociones.
El ambiente de Cartagena estaba cargado del mismo júbilo que impulsó las gestas revolucionarios. No era para menos, teniendo en cuenta que se engalanaba ante la visita de la escuadra nacional, que dejaría en el terreno de juego las últimas gotas de fútbol antes de partir a Brasil, para los Juegos Olímpicos.
Precisamente, las gotas, pero de lluvia, fueron las visitantes en los minutos previos a que rodara la pelota por la cancha del Jaime Morón. El tenue rocío solo sirvió para elevar la temperatura en el lugar.
La gente en el estadio estaba a la expectativa de ver a una Colombia que pusiera condiciones y los primeros toques cumplieron ese deseo. En solo dos minutos una salida rápida de la tricolor por poco acaba en el fondo de las redes, cuando Teófilo Gutiérrez sirvió una pelota al borde de la media luna para un impacto de Dorlan Pabón que pegó en la mano del guardameta Luis López y se fue al tiro de esquina.
Fue un cerco que continuó con repetidos tiros de esquina. uno por poco trae resultados a los de casa. El mismo Dorlan levantó la pelota al primer palo a donde llegó Andrés Felipe Roa para conectar con la testa y forzar a otra acción felina de López, a los 3 minutos.
Pronto el técnico de Honduras, el santandereano Jorge Luis Pinto, no gustó de lo que su equipo inició en el campo. Fue subiendo las líneas y ordenado sus fichas en el campo de juego. Pronto comenzó a disputar la pelota a Colombia y el partido se volvió más luchado e igualado.
Colombia llegó a estar varios minutos sin poder descifrar la portería centroamericana, hasta una desconcentración de la saga que les permitió anotar el primer tanto de la jornada.
Un saque de banda de Helibelton Palacios fue bien aprovechado por un inquieto Harold Preciado, que de acrobática volea entre tres defensores, logró colar la bola en el arco ‘catracho’, cuando transitaban 34 minutos del partido.
Colombia volvía a exhibir fortalezas interesantes con un mediocampo agresivo, basado en la explosividad de Dorlan Pabón y un contante movimiento para buscas socios de Teófilo Gutiérrez, que se estrenaba luciendo la camiseta número diez del elenco nacional.
Sin embargo, los laterales seguían sin convencer mucho. A veces, con tímidos aportes en ataques y en otras oportunidades por su falta de vehemencia en la marca. Fue allí que sobre el final de la primera etapa Pinto mandó a atacar a sus dirigidos.
Primero un desborde desde la izquierda que terminó en un cabezazo que buscaba dirección de gol por parte de Marcelo Pereira, lo que obligó a un gran esfuerzo de William Tesillo para solventar el riesgo sobre la línea de gol, a los 43 minutos.
Tras esto, el puntero Alberth Elis le ganó el duelo a Cristian Borja por la banda derecha de la ofensiva centroamericana y se coló al área, donde tiró con potencia al segundo poste, mismo que devolvió su intento tras un sonoro portazo, a los 46 de la etapa inicial.
Así, los de Carlos ‘Piscis’ Restrepo se fueron al descanso con la ventaja en el marcador, pero con muchas cosas que ajustar, pensando en el segundo tiempo, pero sobre todo con miras a Río de Janeiro.
La segunda mitad inició como terminó la primera. El equipo hondureño intentaba poner paridad al marcador moviéndose directo al arco colombiano. Mientras que los de casa se resguardaban para intentar sorprender a su rival.
Pese a ello, a los 9 minutos el atacante catracho Anthony Lozano se las arregló para hacerse con un espacio y así disparar a quemarropa las manos del arquero Luis Hurtado, quien mandó la pelota al tiro de esquina.
La ofensiva colombiana vivió entonces su mejor momento comenzando a vulnerar sin inconvenientes la meta de Honduras.
La seguidillas de acciones iniciaron a los 18 minutos del complemento, cuando Preciado quedó franco al arco y su disparo se fue elevado de la portería. La acción alebrestó a los aficionado, pues algunos niños de la tribuna de norte saltaron al campo, en una acción que fue rápidamente controlada por el cuerpo de seguridad.
Luego de eso vino el recital de fútbol que se movió al ritmo de la batuta que Teófilo Gutiérrez tenía en los botines.
Los movimientos incontrolables de delantero de La Chinita sacaron de quicio a la defensa catracha. Donde lo buscarán, Teo ya no se encontraba. A los 22 tras un doble enganche casi acomoda la pelota en las piolas. A los 27 un tiro suyo fue salvado milagrosamente por el portero.
Pero a los 40, tras una serie de remates, el goleador barranquillero pegó la bola en el segundo palo para guardarla en las redes. Un suave toque acomodó la ventaja definitiva 2-0 para el combinado nacional.
Tras el tanto, Teo corrió a la tribuna de occidental para enseñar una camiseta, donde llevaba estampada la foto de su abuela doña Aura. La tribuna se deleitó con el goleador, a quien le dedicaron canticos. Era el cierre ideal, en medio de oles y vítores.
Colombia terminó dejando una buena impresión de cara al torneo olímpico. La escuadra nacional arriba a Barranquilla la misma noche de este domingo para afrontar un periodo de tres días de entrenamiento y luego ir a Bogotá, para más tarde marcharse a Brasil.